5 Jun 2025, Jue

Barry B en la sala La Chica de Ayer Salamanca

La noche del pasado sábado, el ambiente (soldout) de La Chica de Ayer estaba cargado de expectativas. Los fanáticos de Barry B, un artista que ha sabido fusionar géneros y crear un estilo único, se reunieron para disfrutar de un espectáculo que prometía ser inolvidable. Desde el primer acorde, quedó claro que no sería solo un concierto, sino una experiencia musical que resonaría en el corazón de todos los presentes.

Barry B, el proyecto musical de Gabriel Barriuso García, nació en 2019 tras años de exploración musical que comenzaron con su participación en la banda de rock The Girondines. Más tarde, Gabriel retomó su carrera musical en solitario, experimentando con Garageband y creando canciones como Kit Kat y Taj Mahal. Con la colaboración de amigos cercanos como el productor Drummie y el guitarrista Sam Gold, lanzó Soleá, que le otorgó reconocimiento en la escena madrileña. En 2022, alcanzó un hito con el lanzamiento de ROOKIES, junto a Drummie y Ralphie Choo, destacándose por su versatilidad y siendo elegida para la campaña de El Corte Inglés.

Barry B, conocido por su habilidad para mezclar el hip-hop con toques de R&B y pop, subió al escenario con una energía contagiosa. Su presencia magnética y su carisma hicieron que el público estallara. La primera canción, hizo que todos se unieran en un coro improvisado, creando una atmósfera de camaradería y celebración, que no cesó hasta terminar el concierto.

El estilo musical de Barry B es una amalgama de ritmos pegajosos, letras introspectivas y una producción pulida que invita a la reflexión. Su habilidad para contar historias a través de sus canciones, combinada con ritmos que hacen que sea imposible quedarse quieto, lo convierte en un artista versátil y atractivo. Durante el concierto, se notó cómo cada canción resonaba con el público, desde los más jóvenes hasta los más experimentados, todos disfrutando de la fusión de géneros que Barry B ofrece.

El concierto culminó con un explosivo cierre. La energía era eléctrica, y el público no podía dejar de bailar. Al final de la noche, todos se marcharon con una sonrisa, llevando consigo no solo la música, sino también un sentido de comunidad y pertenencia.

En resumen, el concierto de Barry B fue más que un simple evento musical; fue una celebración de la diversidad y la creatividad. Su estilo, influenciado por grandes íconos de la música, y su capacidad para conectar con el público lo convierten en un artista que seguramente seguirá dejando huella en la industria. Sin duda, una noche para recordar.

Podremos volver a verle de nuevo en el Negrita Festival.